Ruta por el Bosque mágico de Alija del Infantado
Rutas con niñosEl Bosque Mágico de Alija del Infantado vuelve a la vida después de unos meses de parón y lo hace con nuevas decoraciones, algún cambio en el recorrido y visitas teatralizadas programadas cada mes hasta el verano.
El recorrido es de solo dos kilómetros, entre ida y vuelta, en un pinar habitado por pequeños trasgus traviesos, hadas, xanas, gnomos y duendes.
Esta iniciativa surgió de Eva Hidalgo Ríos, vecina y emprendedora del pueblo de Alija, que desde su regreso regenta negocios como casas rurales y ha incentivado la vida social creando una ludoteca infantil, donde, entre otras actividades, da clases de pintura. Desde que Eva comenzó con la idea rondando en la cabeza de crear el Bosque Mágico, el pueblo se volcó con la iniciativa y además de dar su apoyo, los vecinos se unieron aportando materiales y ayudando en todo lo posible ya que todo está creado a mano.
El proyecto Bosque Mágico nació con el objetivo de dar a conocer el pueblo de Alija Del Infantado en León, rico en patrimonio histórico y cultural, que los últimos años ha sufrido una bajada importante de visitantes, y cierre de servicios como bancos y comercios.
Una vez terminado el recorrido, se propone un juego para encontrar diferentes casas de los seres mágicos repartidos en varios puntos del pueblo. Así, se invita a recorrer sus calles y ver el castillo del S XV, dos iglesias, una de ellas con artesonado mudéjar o el puente de La Vizana, uno de los principales puntos de la Vía de la Plata y en la Edad Media.
Ruta con niños por el Bosque Mágico de Alija del Infantado
La ruta es muy sencilla así que la pueden hacer desde niños muy pequeños. Es imposible transitar con cochecito, sillita o silla de ruedas. Lo que sí es cómodo es para portear. La ruta comienza donde el caño de Alija. Allí mismo encontraréis el primer cartel que os indica por dónde debéis ascender. Tanto la subida (poco tramo) como unos metros más están protegidos por unas cuerdas entre estacas. En esta parte hay que tener algo más de cuidado si los niños son muy pequeños y darles la mano para evitar que se caigan hacia el desnivel. Existe otra manera de hacer la ruta que también está indicada como ‘recorrido sencillo’ y ahorra este tramo, pero manteniendo ciertas precauciones, os recomendamos realizar el que da inicio en el caño.
A la izquierda veremos desde lo alto el pueblo de Alija, en el que destacan las torres de su castillo. Al otro, el pinar en el que iremos descubriendo secretos. A Barbol, el árbol animado, la mina de los gnomos, el valle de las hadas… Cada pocos metros van apareciendo nuevas atracciones. Las casitas están realizadas por Eva, por sus alumnos, niños que han querido aportar su granito de arena y otra gente del pueblo. En cada una de ellas podremos leer el nombre de la persona que la ha esculpido. Los letreros nos van dirigiendo por la ruta sin complicación.
Desde la zona de las hadas se ha habilitado ahora un sendero que nos lleva directamente a la villa de los duendes a través del pinar. Aunque la subida es algo más empinada, es más agradable y está protegida del sol gracias a la sombra que ofrecen los árboles. Por el camino nos encontraremos con los huevos de la dragona Sisu.
Después se baja por el camino hasta una gran escultura de una araña -es Ella-laraña, cedida por el artista José Manuel Baños Lucas- . Seguimos descendiendo para conocer la aldea de los trasgus, que aprovecha antiguas bodegas en desuso. Esta es la parte final, por lo que aquí damos la vuelta para desandar el camino.
A lo largo del recorrido hay códigos QR que os remitirán a la página web. En las redes sociales del Bosque Mágico encontraréis propuestas de lugares para comer y tomar algo. Junto al Castillo hay un parque infantil.