La Cabaña, clases de dibujo y pintura en un refugio creativo muy acogedor

Desde hace unas semanas León cuenta con un refugio para quien quiera cobijarse entre arte, creatividad y cultura. La Cabaña es un nuevo espacio que acaba de abrir la artista Mónica Alija y en el que hemos comprobado que ha cumplido su primer objetivo: que la gente se sienta como en casa. Un lugar inspirador en el que ofrecen clases extraescolares de dibujo y pintura para peques y adultos, donde imparten talleres relacionados con distintas técnicas y en el que albergan exposiciones, charlas y encuentros relacionados con la cultura.

Mónica ha creado un lugar que echaba de menos en León y que sí había encontrado en otras ciudades más grandes. Un espacio abierto en el que descubrir libros especializados en arte, participar en talleres para aprender una técnica nueva, disfrutar en familia creando o, simplemente, observar las creaciones de otros en su zona de exposiciones.

La puerta está abierta para todo el que quiera internarse en el mundo de la creatividad. “Ser creativo es necesario, sea lo que sea a lo que te dediques, te ayuda a tener un punto diferente, otra perspectiva, a ser resolutivo o incluso a no aburrirte en tu trabajo”, explica Mónica. Por eso, para ella es muy importante dejar a sus alumnos expresarse y hacer que pierdan el miedo al papel en blanco. “Hay gente que dice que pinta mal porque lo que dibuja no se parece a la realidad, pero si todos pintáramos igual que la realidad, en todos los museos veríamos lo mismo. Lo interesante es que cada uno tenga su punto de vista, su estilo y su personalidad”, argumenta.

Mónica lleva expresándose a través del arte desde bien pequeña, siempre con un lápiz o un pincel entre las manos, aunque no sabía que eso podría convertirlo en su profesión. Fue un amigo de su hermano el que le habló de la carrera de Bellas Artes y entonces ante ella se desplegó un camino que deseaba recorrer. Primero en la Escuela de Arte de León y después en la Universidad de Salamanca, donde se especializó en retrato, a lo que se ha dedicado desde entonces. Ahora, además de continuar con sus trabajos, transmite sus conocimientos a peques y mayores a través de clases y talleres a partir de los tres años.

Madre de dos niñas pequeñas, ha tejido todo un universo en torno a su cabaña. Así, tiene un guardabosques que la ha ayudado a que el proyecto vea la luz y sus alumnos se dividen en oseznos (de 3 a 7 años), lobatos (de 7 a 12) y cigarras (adultos). Los talleres en familia son las colonias y las reuniones se celebran junto a la hoguera. Un relato fantástico para un espacio real que podéis visitar en el número 33 de la calle Relojero Losada y que está abierto de lunes a viernes de 9.30 a 13.30 y de 17 a 20 horas, y los sábados de 10 a 14.

Clases de dibujo y pintura en La Cabaña

Las clases son semanales y tienen una duración de hora y media. Todas comienzan abordando algún tema de la historia del arte, adaptado a cada edad, y luego se pasa a realizar alguna creación relacionada.

• Oseznos y oseznas. De 3 a 7 años

Se aborda un tema de una manera sencilla. Por ejemplo, el arte rupestre. Conocen los pigmentos y cómo realizaban los dibujos. Después pasan ellos a realizar una obra rupestre y explican qué han pintado y por qué. También trabajan realizando murales gigantes en conjunto y aprenden qué material necesitan y cómo cuidarlo para que no se estropee.

• Lobatos y lobatas. De 7 a 12 años

El primer cuarto de hora está centrado en algún aspecto de la historia del arte para que vayan teniendo algunos conocimientos. Después realizan siempre algún trabajo relacionado con el tema abordado, la época o el estilo y a continuación se centran en lo que cada uno quiere aprender o desea perfeccionar. Uno pide aprender a dibujar ojos y otro quiere saber cómo retratar las flores o cuerpos. Mónica les va explicando lo necesario para que aprendan a hacerlo.

• Cigarras. Adultos

Con los adultos trabaja mucho la parte de desarrollo creativo, algo que le resulta más complicado que con los peques, que están menos condicionados y se sienten más libres. Y en las clases van avanzando también según el ritmo y los intereses de cada uno.

• Talleres ocasionales

Además de las clases extraescolares, en La Cabaña organizan talleres ocasionales como los que han realizado de decoración de calabazas o maquillaje de Halloween. También habrá charlas sobre arte y cultura tanto para quien sepa y quiera conversar con otras personas con inquietudes similares como para el que desee aprender.

Si queréis estar al tanto de todo lo que organizan podéis seguirles a través de Instagram.